Porque nada queda oculto
Sábado 27 de Septiembre de 2025
22 septiembre 2025 - 05:38
El propósito central de esta fecha es fomentar hábitos de transporte menos contaminantes y generar conciencia ecológica, recordando que el exceso de vehículos en las ciudades incrementa la huella de carbono y afecta tanto a la salud de las personas como al medio ambiente.
Cada 22 de septiembre se celebra en distintos países el Día Mundial Sin Coche, una jornada que busca concientizar a la población sobre los efectos del uso excesivo del automóvil y promover alternativas de movilidad más sostenibles.
La propuesta invita a los ciudadanos a dejar el coche estacionado por un día y optar por medios alternativos como caminar, usar la bicicleta, el transporte público o incluso dispositivos como monopatines. La idea es demostrar que estas opciones pueden resultar prácticas y beneficiosas, además de reducir la contaminación atmosférica y acústica.
La efeméride tiene sus raíces en la crisis del petróleo de 1973, cuando los países árabes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) suspendieron la venta de crudo a las naciones que apoyaron a Israel durante la guerra de Yom Kipur. La escasez de combustible llevó a varios gobiernos europeos a promover medidas de ahorro energético y a repensar la dependencia del automóvil.
A partir de entonces se impulsaron alternativas como el racionamiento de gasolina y campañas para promover modos de transporte más eficientes, sentando las bases de lo que luego se institucionalizó como el Día Mundial Sin Coche.
El tráfico rodado contribuye a la emisión de gases nocivos como monóxido de carbono (CO), dióxido de carbono (CO2) y óxidos nitrosos (NOx), responsables de la contaminación del aire y del deterioro de la capa de ozono. Además, el uso continuo del vehículo implica gastos fijos para las familias —combustible, estacionamiento, seguros, impuestos y mantenimiento—, así como un aumento en los índices de accidentes de tránsito.
Desde el punto de vista de la salud, la dependencia del automóvil favorece el sedentarismo, asociado a problemas como obesidad y enfermedades cardiovasculares.
El Día Mundial Sin Coche recuerda que el transporte individual no siempre es indispensable, especialmente en distancias cortas, donde caminar o pedalear puede resultar más saludable y económico.
La efeméride constituye una invitación a replantear la relación con el entorno urbano y a fortalecer la cultura del uso de medios de movilidad sustentables, en beneficio del ambiente y de la calidad de vida de las personas.