Porque nada queda oculto
Viernes 09 de Mayo de 2025
3 noviembre 2024 - 12:01
El secretario general del Sindicato Único de Trabajadores Municipales acusó al intendente Passaglia de ser artífice de “una estructura de favoritismo que margina” a los trabajadores.
Rodolfo Cecchi, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores Municipales (SUTM), adherido a FESIMUBU, “a través de una denuncia formal presentada ante el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires” acusó a la Municipalidad de San Nicolás, a cargo del intendente Santiago Passaglia, de ser artífice de “una estructura de favoritismo que margina” a los trabajadores. La ultima acción que el sindicalista le recrimina al municipio es la exclusión del pago del bono de $ 1.000.000 a cientos de trabajadores. Un total de 165 de los 699 no percibieron la cifra extraordinaria.
A través de un comunicado, el SUTM manifestó lo siguiente:
“El accionar de la administración del Departamento Ejecutivo liderado por Ismael Santiago Passaglia expone una preocupante falta de sensibilidad y transparencia en el tratamiento de los derechos laborales de los trabajadores municipales de San Nicolás. El reciente decreto que asigna una gratificación extraordinaria selectiva y restrictiva pone en evidencia prácticas que, lejos de promover la igualdad, refuerzan una estructura de favoritismo que margina a aquellos que legítimamente demandan justicia y condiciones dignas de trabajo.
A través de una denuncia formal presentada ante el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, nuestra organización sindical ha señalado cómo este supuesto «incentivo» encubre en realidad un aumento arbitrario. La exclusión de aquellos trabajadores que tienen reclamos legítimos, que están afiliados a nuestra organización o que simplemente no comparten la visión política del gobierno municipal muestra una clara discriminación que parece tener la intención de dividir y silenciar a los empleados. Resulta, cuanto menos, indignante que el decreto 1726/24 intente legitimar esta injusticia bajo el disfraz de una gratificación no remunerativa, condicionada a un cumplimiento laboral extremo.
Mientras se imponen estos requisitos selectivos, la realidad de los empleados municipales dista de ser favorable. Los salarios han quedado muy por debajo del estándar de otros municipios provinciales, y aquellos que mantienen una actitud de dedicación y entrega diaria no reciben el reconocimiento que merecen. Sin embargo, observamos con tristeza cómo se mantiene en cargos bien remunerados a familiares y amigos cercanos al intendente y a figuras políticas afines, personas que muchas veces ni siquiera cumplen con la asistencia laboral básica. La moral y la justicia laboral quedan en entredicho, mientras que los medios de comunicación son manipulados para presentar una imagen pública cuidadosamente construida, ajena a la realidad de quienes viven la precarización del trabajo.
Esta discriminación afecta directamente a más de 160 familias que han quedado fuera de estos «beneficios» encubiertos. Estas personas, al ser injustamente tildadas de incumplidoras, enfrentan dificultades económicas cada vez mayores para cubrir sus necesidades básicas. Y sin embargo, fueron precisamente estos trabajadores los que estuvieron al frente en momentos de crisis, como las inundaciones de marzo que dejaron sin luz a gran parte de San Nicolás, mientras el intendente se encontraba ausente, celebrando en otro lugar.
Es momento de que el gobierno municipal reconozca su responsabilidad y empiece a valorar el esfuerzo y la integridad de sus empleados. La justicia social comienza con un salario digno para todos. Es imperativo terminar con la persecución a quienes no se alinean con su «casta», cesar los retiros voluntarios forzados, y empezar a brindar estabilidad laboral a los trabajadores precarizados. La única lucha que se pierde es la que se abandona. Por ello, exigimos respeto, equidad y justicia para quienes diariamente sostienen el funcionamiento de nuestra comunidad”.